GRANADA: NO QUIERO SELFIES EN LA ALHAMBRA

No puedo odiar los palos de selfies porque no son humanos ahora bien, creo que puedo llegar a odiar a los que lo usan, que aunque no parecen humanos, lo son. Es terrible la moda, que ya viene de lejos, pero en algunos casos es patética. No se puede estar delante de una belleza impresionante, llámese Sharon Stone, Charlize Teron, gran Cañón del Colorado o... ¡¡¡ la Alhambra!!! y pretender hacerle sombra con una "autofoto". Es "pa" descojonarse de risa ante tanto "voyeur" que no tiene ni idea de lo que esta retratando o, aún peor, se da una importancia con su cara delante de tamañas maravillas naturales. Y la cosa va a peor.

Pero bueno a lo que yo venía.

Estos días atrás, con el gran fotógrafo y  mejor amigo José Alberto Puertas fuímos documentar nuestro programa de Washington Irving y , por sexagésima vez en mi vida, visitamos La Alhambra granadina. Y aunque de todo es bien sabido la rivalidad entre Alhambra y mi Giralda con su Catedral, no dejo de reconocer que el "moro llorón" y sus antepasados crearon una maravilla sin igual en la capital granadina. Cargados de dos nikon y dos objetivos gran angular( un 14 y un 24) nos paseamos durante varias horas y nos dimos el gustazo de tirar algunas fotos bien hermosas ( en las que no salimos¡¡¡¡¡)

y eso que el día estaba tristote, pero que imagen más hermosa desde el paseo de los Tristes

en lo jardines del Generalife con los naranjos a reventar

Reflejos imposibles de un palacio nazarí tan hermoso como el mismo firmamento

Rincones imposibles de la sala de los Abencerrajes

Arquitectura circular del palacio de Carlos V

Donde Irving soñó sus leyendas de la Alhambra

Parecía imposible sacar el patio de los leones sin "selfides" pero lo conseguímos.

Esta última fotos es homenaje al oficio de lutier granadino  y a mi buen amigo José Alberto que sin prisa pero sin pausa, se vino caminando conmigo hasta Los Manueles para tomarnos una cervecita fresquita y unas berenjenas mozárabes con su miel de palma. 

Después de la primera cerveza, como dice la canción, acabamos cantando "la vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida ay Dios...".

Y como reflexión de las fotografías, yo quiero imaginar que los "selfidos" cuando miren sus fotos veran que en ellas, detrás suya  aparecerán sombras y extrañas cosas que el individuo/a no sabrá interpretar por que no habrá visto el objeto fotografiado y se preguntará incrédulo "que coño es ese palacio que sale detrás de mi" .

"Pa" mear y no echar ni gota.

Bueno os invito el 21 de Septiembre a acompañarnos a los dos, al artista y al que suscribre, a descubrir los caminos románticos de Irving entre Sevilla y Granada, os dejo la información en este enlace.

Y este vídeo lo que filmamos solos en el Patio de los Leones, ¡algo nunca visto!