OCÉANOS, los grandes desprotegidos


En un contexto de desarrollo sostenible, la preservación de la biodiversidad es esencialmente vital en nuestros mares y océanos. La biodiversidad marina es uno de los tres pilares fundamentales del desarrollo sostenible (económico, social y ambiental) y permite un funcionamiento saludable del planeta, brindando servicios que sustentan la salud, el bienestar y la prosperidad de nuestra especie. En particular, los mares y océanos constituyen más del 90 por ciento del espacio habitable del planeta y albergan unas 250.000 especies conocidas. Estos ecosistemas y la vida en ellos permiten subministrar más de la mitad del oxígeno que respiramos, absorben anualmente alrededor del 26% del dióxido de carbono antropogénico emitido a la atmósfera (mitigando significativamente el cambio climático), controlan en el clima a nivel planetario, representan una fuente de ingresos para cientos de millones de personas y contribuyen a la seguridad alimentaria a nivel mundial. Además, los ecosistemas marinos brindan otros innumerables servicios a las comunidades costeras de todo el mundo. Por ejemplo, los manglares son una fuente importante de alimentos para más de 210 millones de personas, pero también ofrecen medios de subsistencia, agua limpia y protección contra la erosión y fenómenos meteorológicos extremos.

Dados los recursos y beneficios que proporciona el océano, no es sorprendente que los mayores asentamientos humanos se hayan desarrollado cerca de la costa. De hecho, aproximadamente un 82% de la población mundial vive en un radio de menos de 150 km de la costa. No obstante, la intensa actividad antropogénica en estos lugares y la intensa (y nada sostenible) explotación de mares y océanos ha derivado en importantes niveles de polución y un drástico impacto negativo sobre la biodiversidad, lo que compromete el funcionamiento saludable del planeta y su capacidad para proporcionar los servicios y bienes que necesitamos para sobrevivir y prosperar en un futuro inmediato.


A pesar de la importancia de preservar la biodiversidad marina, alrededor del 64% de las aguas oceánicas se encuentran fuera de límites jurisdiccionales y por consiguiente su gestión ha sido ignorada durante años por los principales responsables políticos. Tan solo en 2015 la ONU aprobó la Agenda 2030 sobre el Desarrollo Sostenible, donde el objetivo 14 pretende potenciar la acción por la conservación y el uso sosteniblemente los océanos, los mares y los recursos marinos. No obstante, este mismo Agosto veíamos en las noticias como las negociaciones del tratado de protección global de los océanos (que pretende proteger el 30% de la superficie de alta mar o aguas internacionales para 2030) siguen fracasando. Necesitamos unos océanos y mares sanos hoy para sobrevivir mañana, así que hay que ponerse las pilas para protegerlos.


UNIVERSIDAD LIBRE DE BRUSELAS
@maria90geo

Los próximos días 21 a 25 de Septiembre celebramos el FICCS, una reunión sobre Ciencia, Comunicación y Desarrollo Sostenible que abarcará todos estos temas, la inscripción es libre y se retransmitirá por streaming. Si quieres participar tanto como oyente como dándonos tus opiniones solo tienes que inscribirte en este enlace.

Comentarios

  1. Una pena que siendo fuente fundamental de vida, siga siendo el gran desprotegido para la humanidad. El océano es fundamental y debemos conocerlo más y protegerlo de forma integral.

    ResponderEliminar
  2. No solo desprotegidos sino también desconocidos... ¡sabemos más sobre el espacio exterior que sobre nuestros océanos!

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares