EL TEIDE, UN VOLCÁN VIVO

El Teide desde Hermigua en La Gomera

Venimos estos días de una tierra volcánica como es Islandia y de seguida nos viene a la memoria nuestras queridas Islas Canarias. Y no tan solo por su belleza a la que se admira, y mucho, por tierras islandensas, sino por sus "tremores" como diría mamuni.

El territorio vulcanológicamente activo en España son las Canarias, donde todas las islas, a excepción de La Gomera, se consideran activas, es decir con ganas de moverse y dejarnos fuegos de artificios en cualquier momento como hiciera no ha mucho el Tagoror en El Hierro o el Tajogaite en la Palma. 

En Canarias, desde el  Holoceno, que son aproximadamente los últimos 11.700 años, la tierra no ha dejado de moverse. No todas las islas por igual, pero toditas se han movido más o menos en estos miles de años atrás. Las más moviditas últimamente, las mencionadas y chiquitas El Hierro y La Palma, por encontrase ambas cerquita de la bolsa magmática de la falla que las soporta. 

Sin duda en los últimos siglos es  La Palma,  la que más erupciones ha tenido. Durante estos últimos seiscientos años, en La Palma ha habido siete erupciones; en Tenerife se han registrado cuatro; en El Hierro, una y en Lanzarote, otras dos.

Pero ahora parece que la que más esta llamando la atención es la isla de Tenerife, con sus movidos enjambres sísmicos dando sustos cada día a los científicos. Dentro del parque Nacional del Teide hubo una erupción hace tan solo 225 años, la de Chahorra o Narices del Teide en 1798, por lo que es esperable que pueda haber nuevas erupciones dentro del parque en el futuro. 

El pasado mes de Noviembre, el Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan) detecto más de 100 sismos de baja magnitud en Las Cañadas del Teide, a profundidades de entre 10 y 20 kilómetros, para esto mi sobrino Jon diría "agüita" capitán.

Y por si fuera poco, otro estudio científico ha permitido visualizar y caracterizar por primera vez un "corazón caliente" de magma debajo de la isla de Tenerife, situado a menos de 10 kilómetros de profundidad de la boca del volcán Teide, lo que podría ser una señal precursora de un proceso eruptivo en el mismo.

Pese a la nieve, el Teide esta muy caliente

Se trata de un trabajo de colaboración científica entre investigadores del Trofimuk Institute of Petroleum Geology and Geophysics de Novosibirsk, en Rusia, el Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan) y la Universidad de Granada y que constatan que estos reservorios magmáticos, pueden ser la fuente de erupciones muy explosivas como la que ocurrió en el volcán de Montaña Blanca hace alrededor de 2.000 años. También ha servido para interpretar el incremento de la sismicidad en Tenerife y la emisión de dióxido de carbono por el cráter del Teide, que el Involcan ha detectado desde finales de 2016 y que nosotros comprobamos cada vez que subimos a la cima de Teide.

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