PLAYA DE LA CONCHA.DONOSTI. (ESPAÑA)

Las playas de Donostia-San Sebastián han sido uno de los elementos identificativos de la ciudad, por su ubicación tan marcadamente urbana. Cada una de las playas existentes en la ciudad La Concha, Ondarreta y la pequeña playa de la Isla Santa Clara en la bahía de La Concha, y la playa de Zurriola en el barrio de Gros, poseen por si solas personalidad y belleza pero es sin duda la Playa de La Concha, la que suscita más admiración a los paseantes. Creo sinceramente que es la mejor playa urbana de España y probablemente de Europa. Desde el monte Igueldo (oeste) hasta el monte Urgull (este), la bahía tiene unos 2 km de línea de playa, de los cuales los primeros 600 m (oeste) corresponden a la Playa de Ondarreta y los 1400 restantes (este) a lo que es la Playa de la Concha propiamente dicha. En el Palacio Real de Miramar, la avenida se transforma el Paseo de la Concha, que recorre el perímetro de la playa hasta la altura del Ayuntamiento. Es ese trayecto el que hace más singular la playa.

Es verano, en la arena los jóvenes apuran sus últimos juegos, el mar comienza a retirarse en su ciclo de mareas y el sol cae por detrás del monte Igueldo. Una chica sale del agua y su silueta se dibuja en un claroscuro. En la acera las abuelas vascas pasean, hermosos recuerdos de antaño. Vestidas de tarde con su abanicos en la mano. Los abuelos de boina discuten sobre política. Los turistas caminamos con la boca abierta. Sopla un brisa suave, el blanco de las farolas se confunde con el pálido color del cielo. No hay músicos solo las olas.

Se hace la noche y La Concha estalla en belleza, las farolas se alumbran, el mar refleja su luz, los palacetes se iluminan proyectando el tugsteno al mar, las barcas se mecen en la bahía en una cuna húmeda, la brisa mojada ilumina el asfalto, las luces de los coches adornan la estampa, suena una trompeta, el faro dispara hacia el mar, huele a pescado, las olas mecen lo sueños.

Hoy he paseado por la playa de la Concha