AGORA, EL PEPLUM DE AMENABAR

Ha levantado expectación la película de  Amenabar, incluso se han realizado press trips a los escenarios donde la rodo en la isla de Malta. Bueno, es el marketing moderno que todo se ha de vender con mucha expetación. El cine lleno a abarrotar de un público heterogeneo, no solo en la edad sino en la cultura y en las ganas de ver cine, la mayor parte esperando un Hollywood de acción. Acierto grande el no colocar el primer  cartel que se imagino para la película ñoño y soso. Mucho mejor y logrado el segundo con una hermosa Rachel Weisz alejada e inexpresiva, dando entereza a la película.

Pues ya estamos en el multicines con palomitas y empieza la sesíón donde nos van a explicar que Hipatia (Rachel Weisz), una mujer de enorme sabiduría en un mundo gobernado por hombres,  intentará salvar el conocimiento albergado en la biblioteca de Alejandría de una rebelión provocada por los seguidores de un nuevo culto conocido como cristiandad. Tela

Y nos comimos las palomitas pensando que le ha salido un gran documental a Amenabar, que la historia esta bien montada y producida, que los decorados y el ordenador se han llevado a las mil maravillas, pero al encender los focos, todos nos quedamos tiesos, como queriendo entender lo inentendible. Vamos que no hace falta tanta inversión para tan pequeña historia. Que como documental cuela pero la historia no se aguanta por ningún lado y es una pena, porque la Weisz lo borda en su papel de fría  y hermosas filósofa de año I. Los demás para olvidar.

Recuperará el dinero, el cine estaba a reventar pero el Marketing no le dará la tranquilidad de saber que no ha hecho una buena película por que no, no la ha hecho, y aunque se empeñen Tele 5 y Canal Plus en darle coba, la peli es infumable.